viernes, 19 de septiembre de 2014

Derecho a la escolarización

Mi hija de dos años y medio nació con sordera profunda. En la actualidad tiene un implante coclear que le permite oír e ir progresando como cualquier niño de su edad. Gracias a él ha desarrollado el lenguaje y entiende y responde a todo cuanto se le dice.
A día de hoy está en el primer ciclo de Educación Infantil en un centro adscrito a otro de primaria concertado. En su momento escribimos a dicho centro pidiendo información del mismo y puntualizando que la niña tenía unas necesidades educativas específicas, sin dar más detalle de lo que le ocurría. La sorprendente respuesta fue que no creían que nuestra hija debiera estudiar en ese centro. Acudimos a hablar personalmente con el director para que nos expusiera sus motivos y nos señaló que estos niños normalmente lastraban al resto y que eran un estorbo para los otros alumnos. Cuando le expusimos que no era así en absoluto, nos dijo que le mandáramos información de lo que le pasaba (hasta ese momento él ni siquiera sabía lo que necesitaba, ni el problema que tenía) y que el departamento de orientación nos contestaría dándonos los motivos por los que no debía matricularse allí.
Evidentemente, hemos buscado un centro mejor para nuestra hija, con otros valores que son los que queremos que obtenga, pero entendemos que se le ha dado un trato discriminatorio e injusto.— Sandra López González.

Para empezar mi nuevo blog en el instituto IES Don Bosco, me gustaría empezar con una noticia sobre la discriminación escolar en un niña en su etapa de infantil. La noticia trata de una niña con sordera profunda, pero gracias a un implante coclear puede escuchar progresivamente y sus padres la escolarizan en un centro infantil y se sorprende a ver que le responden que en ese centro no creen que su hija pueda progresar al mismo nivel que el resto de sus compañeros, en definitiva no se quieren hacer cargo de una niña que conlleva unos cuidados más específicos. Al final los padres encuentran un colegio donde la niña se siente integrada y los profesores cuentan con ella para todo tipo de actividades.

Mi opinión sobre la noticia es que me parece injusto el trato que se le puede dar a una niña tan pequeña por el simple echo de que puede acarrear más cuidado que el resto de sus compañeros. Gracias a muchas personas, este tipo de acciones cada vez se ven menos y podemos ver a niños con alguna discapacidad realizando una vida diaria como cualquier otro niño.

Espero que os haya gustado la información que os he llegado a dar gracias a este artículo de una madre que ve injusto y discriminatorio que se le ha dado a su propia hija y entre todos podamos parar este tipo de acciones.


Un cordial saludo, vuestro único chico.. De momento.

3 comentarios:

  1. Pues es curioso y una pena, pero una realidad. Es uno de los motivos por los que los centros privados supuestamente funcionan mejor que los públicos. Este alumnado les requiere de recursos y sus resultados tienden a ser más bajos que la media, lo que influye en las estadísticas del centro a efectos burocráticos y publicitarios (como el Informe Pisa).

    Un saludo.

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  2. Muy buenas Jose Antonio!!
    Es una noticia muy interesante. Es una pena que discriminen a este tipo de personas. Pienso al igual que tu que no debería de darles ese trato solamente por tener unas necesidades mas específica. Deberían de darles el mismo trato que se le da a los demás. No por tener un problema o necesitar más o menos apoyo, debemos discriminar a nadie. Esto suele verse todos lo días. Menos mal que su madre tomó una buena decisión y puede recibir la misma educación el resto de sus compañeros.

    Un saludo!! Y ya no eres el único chico de la clase!!

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  3. Por desgracia la falta de recursos hace que se lleguen a situaciones de discriminación como esta, es la realidad que nos encontramos consecuencia, una vez más de la crisis

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